El día 2 de noviembre ha finalizado el primer Curso sobre el manejo del paciente con rotura de aneurisma de aorta abdominal (AAAR). Este curso se integra en una campaña para conseguir disminuir la elevada mortalidad de esta patología, en la que también se incluyen la implementación de un detallado protocolo multidisciplinar para la atención a estos pacientes y el establecimiento del Código Aorta de nuestra área.
La rotura de un aneurisma de aorta abdominal representa una urgencia vital con una mortalidad cercana al 100% si no se trata de forma eficiente. Se considera la décima causa de muerte en hombres mayores de 65 años y, según los datos epidemiológicos, unas 25 personas sufrirán esta patología cada año en nuestra área de influencia. Según recientes publicaciones, en Cataluña tiene una mortalidad global del 69%, una tasa de cirugía del 60,5% y una mortalidad postoperatoria del 48,8%.
El Servicio de Angiología y Cirugía Vascular del HUB es referente y pionero en el tratamiento de esta urgencia y ha logrado una disminución de diez puntos en la mortalidad en los últimos diez años, al pasar de un 42% a un 32% de mortalidad postoperatoria.
El curso de simulación ha sido diseñado y coordinado por el Servicio de Angiología y Cirugía Vascular, con implicación del Servicio de Anestesiología y Reanimación y del Equipo de Emergencias Especiales (Enfermería y Celadores), en el marco del programa de formación continuada del HUB.
Ha constado de un primer bloque de simulaciones (1, 8 y 15 de junio), una parte teórica dirigido a Anestesiología (13 de octubre), Cirugía Vascular (13 de octubre), Enfermería (14 de octubre) y Celadores (14 de octubre) y un segundo bloque de simulaciones (19 y 26 de octubre y 2 de noviembre).
Es la primera vez en nuestro centro que se han realizado simulaciones en el quirófano híbrido utilizando modelos creados para la ocasión que reproducían el entorno de una emergencia real. También se han realizado sesiones teóricas sobre todos los detalles del protocolo.
Ha participado todo el equipo de emergencias, incluyendo celadores, enfermería, anestesiología y cirugía vascular. Los diversos profesionales han formado equipos de guardia y se han medido los tiempos que se tarda en realizar el traslado y la estabilización del paciente, con resultados sorprendentes.
La experiencia del curso ha servido para mejorar el proceso del tratamiento y la coordinación entre los distintos miembros del equipo.
Las valoraciones realizadas han sido muy buenas y ya se están diseñando nuevos cursos para poder ofrecer esta formación, tanto teórica como a nivel de simulación, al resto de equipos de urgencias.