Farmacoterapia: uso seguro y responsable de los medicamentos

La farmacoterapia es el tratamiento de las enfermedades mediante el uso de medicamentos. Su principal objetivo es conseguir el máximo beneficio terapéutico con el mínimo riesgo para el paciente.

Además de tratar enfermedades, la farmacoterapia desempeña un papel fundamental en la prevención de complicaciones, el control de síntomas y la mejora de la calidad de vida.

Objetivos principales:

• Curación de la enfermedad.
• Mejorar el estado de salud y aliviar los síntomas.
• Prevenir recaídas, complicaciones o efectos adversos.
• Promover la seguridad y eficacia del tratamiento.

Personalización del tratamiento:

Cada paciente es único. Los profesionales sanitarios ajustan el tipo y dosis del fármaco según factores como la edad, el peso, la función renal y hepática, la genética, la presencia de otras enfermedades o la toma simultánea de otros medicamentos.

Monitorización terapéutica:

Algunos medicamentos (como antiepilépticos, anticoagulantes o inmunosupresores) requieren controles analíticos periódicos para asegurar que la cantidad de medicamento en el organismo son adecuados y seguros.

Adherencia al tratamiento:

Cumplir con las pautas indicadas es esencial para obtener buenos resultados. Saltarse dosis, modificar la dosis o interrumpir un tratamiento puede provocar recaídas, resistencias o fracaso del tratamiento farmacológico.

• Automedicación: Tomar medicamentos sin prescripción puede generar interacciones graves o efectos indeseados.
• Interrupción prematura del tratamiento: Suspenderlo antes del tiempo indicado (por ejemplo, un antibiótico) reduce su eficacia y puede favorecer la selección de resistencias bacterianas.
• Compartir medicación: Cada fármaco es específico para una persona y situación clínica concreta. No se pueden compartir medicamentos.
• Desconocimiento de las interacciones: Algunos medicamentos pueden verse afectados por alimentos, plantas medicinales, alcohol, tabaco u otros medicamentos.
• Almacenamiento incorrecto: El calor, la humedad o la exposición a la luz pueden reducir la efectividad de un medicamento.

• Sigue exactamente la prescripción médica, sin realizar ajustes por tu cuenta.
• Infórmate adecuadamente sobre posibles interacciones con alimentos, bebidas, plantas medicinales o fitoterapia u otros medicamentos.
• Conserva los productos en lugar fresco, seco y protegido de la luz, fuera del alcance de los niños.
• Revisa la fecha de caducidad antes de tomar cualquier medicamento.
• Pregunta siempre al equipo sanitario frente a dudas o si aparecen efectos adversos.
• No tires medicamentos en el lavabo ni en la basura; llévalos a los puntos SIGRE de las farmacias para el reciclaje seguro.

• Monitorización farmacológica: Seguimiento de fármacos críticos como antimicrobianos, antiepilépticos o inmunosupresores para ajustar sus dosis según los valores analíticos.
• Individualización terapéutica: Adaptación de las pautas de medicación según edad, peso, genética o función de los órganos del paciente.
• Educación sanitaria: los/las farmacéuticas de hospital realizan visitas a paciente para fomentar el conocimiento del tratamiento, mejorar la adherencia y prevenir errores e incompatibilidades.
• Validación farmacéutica: El Servicio de Farmacia revisa la prescripción antes de la dispensación para detectar posibles interacciones o duplicidades tanto en pacientes ingresados ​​como ambulatorios.
• Seguimiento continuado: Colaboración con equipos médicos y de enfermería para mantener una comunicación directa con el paciente y resolver incidencias.

¿Puedo tomar medicamentos con alcohol?

Depende del fármaco. Algunos medicamentos pueden verse reducida su eficacia o aumentar la toxicidad con alcohol. Consulta siempre con tu médico o farmacéutico/a.

¿Qué hago si olvido una dosis?

No dupliques la siguiente. Sigue las indicaciones del profesional sanitario.

¿Los medicamentos caducados son peligrosos?

Sí. Pueden perder eficacia o resultar nocivos. Nunca tomes medicación caducada.

¿Es seguro triturar las pastillas o abrir las cápsulas?

No siempre. Algunas formas farmacéuticas están diseñadas para liberar el medicamento lentamente o protegerlo del ácido gástrico. En pacientes con dificultad para tragar, es necesario adaptar las formas farmacéuticas o utilizar alternativas seguras. Consulta siempre antes de modificar su presentación.

¿Cómo afecta la nutrición al tratamiento farmacológico?

Ciertos nutrientes o dietas pueden influir en la absorción de los fármacos. Por ejemplo, la presencia de grasas puede favorecer o dificultar su asimilación.