Los profesionales de la Unidad de EM han compartido en una jornada con los pacientes los nuevos avances en el tratamiento y prevención de la enfermedad
Encontrar los tratamientos para frenar el componente neurodegenerativo, principal responsable de la discapacidad que provoca la esclerosis múltiple; desarrollar técnicas efectivas de regeneración de los tejidos que permitan recuperar las funciones neurológicas afectadas por la enfermedad y detectar marcadores biológicos para anticipar el pronóstico a nivel individual. son tres de los principales ejes de investigación que han protagonizado hoy una Jornada en el Hospital Universitario de Bellvitge (HUB) con motivo del Día Mundial de la Esclerosis Múltiple, que se celebra el 30 de mayo.
La Unidad de Esclerosis Múltiple (EM) del Servicio de Neurología del HUB ha organizado esta jornada para explicar los nuevos avances logrados en el abordaje y búsqueda de la enfermedad y dar voz a los pacientes, para que aporten también soluciones al impacto de la EM en su vida diaria y se conviertan en plenamente activos en su autocuidado. Tal y como explica el Dr. Sergio Martínez Yélamos, jefe de la Unidad de Esclerosis Múltiple del Hospital de Bellvitge e investigador principal del IDIBELL, “dando voz a los pacientes de esclerosis múltiple y compartiendo tratamientos, experiencias de adaptación y resiliencia frente a la enfermedad les estamos empoderando para que tomen las mejores opciones informadas en un modelo asistencial basado en las decisiones compartidas”.
En este enlace podéis ver el vídeo de la jornada
En la primera parte de la jornada, tres pacientes de esclerosis múltiple, Marisa Lafrón, Eva Blanch y Jordi Juan Palacios, han compartido su experiencia en torno a momentos clave, como el momento de recibir el diagnóstico; la comunicación en sus ámbitos laborales o las estrategias para conseguir que la enfermedad no sea un estigma con el que convivir.
En la segunda parte del encuentro, el equipo de profesionales de la Unidad de Esclerosis Múltiple repasó los ya consolidados tratamientos existentes, y las nuevas perspectivas terapéuticas que aportan, por ejemplo, los inhibidores de la enzima BTK.
En los últimos años se han logrado grandes avances terapéuticos contra el componente inflamatorio de la esclerosis múltiple gracias a nuevos tratamientos farmacológicos. La incorporación de nuevos fármacos en el registro terapéutico de la esclerosis múltiple, sobre todo los anti-CD20 (eliminan linfocitos B en la sangre), ha permitido reducir entre un 80% y un 90% tanto los brotes de la enfermedad como la aparición de nuevas lesiones en las resonancias. Cabe decir que la Unidad de Esclerosis Múltiple del HUB ha participado en los ensayos clínicos internacionales que han facilitado la aprobación de estos nuevos fármacos.
Ahora, los esfuerzos de investigación se concentran en el desarrollo de una medicina de precisión y personalizada, capaz de determinar el tratamiento más adecuado para cada persona y momento de su vida. La Unidad trabaja de forma coordinada en colaboración con los otros integrantes de la Red Asistencial EMxarxa en el descubrimiento de nuevos biomarcadores que faciliten el pronóstico y el control de la enfermedad para aumentar “nuestra capacidad para diseñar estrategias de tratamiento farmacológico individualizadas y adaptadas a las características de cada persona”, concluye el Dr. Martínez Yélamos. En esta línea y continuando con la investigación llevada a cabo en la Unidad en los últimos años sobre el valor de los biomarcadores en líquido cefalorraquídeo, actualmente trabaja con el objetivo de evaluar la utilidad de algunos biomarcadores obtenidos en suero, dada su mayor accesibilidad (no hace falta hacer una punción lumbar, con una venopunción es suficiente).
“Además, algunos de estos biomarcadores, junto con posibles marcadores radiológicos, pueden ayudarnos a identificar pacientes con alto riesgo de desarrollar una fase secundaria progresiva de la enfermedad”, explica el Dr. Martínez Yélamos. Para avanzar en esta línea, la Unidad de EM desarrolla, en colaboración con el IDI-Bellvitge, estudios de radiómica que podrían permitir anticipar en varios años la aparición clínica de la progresión, de modo que a estos pacientes se os puedan ofrecer tratamientos más agresivos en unas fases más precoces de su evolución. Pasados los años, algunos pacientes desarrollan una forma secundaria progresiva de la esclerosis múltiple. En estos casos, aunque no existen brotes ni aparecen lesiones nuevas en las resonancias sucesivas, los pacientes sufren un empeoramiento neurológico lentamente progresivo. “La eficacia de los nuevos fármacos en este tipo de pacientes es más modesta, por lo que éste es otro foco en el que deben concentrarse esfuerzos de investigación”, concluye el Dr. Martínez Yélamos.
Una Unidad referente del trabajo en red
La Unidad de Esclerosis Múltiple del HUB trata actualmente a más de un millar de pacientes, trabajando, además en red con otros seis centros del territorio de la región Metropolitana Sur del Instituto Catalán de la Salud (ICS). Este trabajo en red hace posible abordar de forma consensuada en sesiones clínicas 350 casos al año y seguir el tratamiento de unos 150 casos.
Por su parte, en los últimos 5 años ha participado en 15 ensayos clínicos; ha desarrollado 9 proyectos de investigación clínico no competitiva; 4 de proyectos competitivos de investigación básica, en colaboración con la Universidad de Barcelona y de otros hospitales catalanes y ha realizado más de 50 publicaciones nacionales e internacionales y 60 comunicaciones nacionales e internacionales en este mismo período