- Impulsar la cultura de seguridad del paciente que permita la identificación y el análisis de hechos adversos, aportando soluciones para prevenirlos y corregirlos.
- Desarrollando prácticas seguras mediante la formación y la elaboración de protocolos y procedimientos, que mejoren la seguridad del paciente.
- Hacer el seguimiento, mediante indicadores, de la seguridad del proceso asistencial.
- Promover la investigación, la docencia y la innovación en seguridad del paciente.
- Facilitar una cultura de seguridad en el hospital participativa, no punitiva, y de aprendizaje y mejora continua.
- Establecer las prioridades de seguridad dentro del hospital, diseñando y poniendo en marcha prácticas seguras en todos los ámbitos.
- Implantar metodologías de trabajo que mejoren la detección y respuesta eficaz a los problemas de seguridad del paciente.
- Arrancar mecanismos proactivos que faciliten el desarrollo de la atención en un entorno seguro, reduciendo la aparición de efectos adversos.
- Desarrollar acciones que permitan la participación de los enfermos/familiares en temas relacionados con su proceso asistencial y con su seguridad.
