Entrevista a Sergi Ferri, autor del relato El neumólogo y la mantis religiosa, Desde mi habitación Vol. I (pág. 107)

Relathos - Sergi Ferri
Relathos - Sergi Ferri

"Me hizo mucha ilusión ver publicado mi relato y me ayudó a comprender un poco mejor todo el proyecto"

 

- ¿Qué pensaste cuando tuviste el primer contacto con el proyecto RELAT-Hos? ¿Cómo lo conociste?

- Mi primer contacto con el proyecto RELAT-Hos es un cartel que me sorprende y me hace pensar 'mira qué iniciativa', pero sin idea alguna de participar. Mientras estaba ingresado, me acompañaba una amiga de Valencia, que me insistió mucho en que participara, “estás aquí ingresado, no haces nada, ¿por qué no escribes? así aprovechas el tiempo un poco y te lo vas a pasar mejor”. La verdad es que nunca se me había pasado por la cabeza la posibilidad de ponerme a escribir, pero mi amiga me alentó un poco y en un par de noches tenía escrito el relato.

- ¿Entonces no tuviste claro desde el principio que querrías participar, ni mucho menos, no?

- Al principio no, pero cuando me puse... tenían que ser dos folios manuscritos, pero quizás me hubiera extendido más... Se podría decir que soy cliente habitual de esta casa, porque he tenido patologías del páncreas y una última del pulmón que me provocó un par de ingresos. Llevo quizás desde el año 2008 haciendo ingresos reiterados aquí en el Hospital de Bellvitge. En 2018 todavía tenía días por delante por un problema en los pulmones que hasta me hizo plantearme que la vida se puede acabar en cualquier momento y que aquél podría ser mi momento. En aquella ocasión, cuando me puse a escribir, mi objetivo era plasmar un agradecimiento ¡aunque no lo parezca, pues el médico protagonista muere dos veces en un par de folios manuscritos! Aquel médico simbolizaba para mí todo el personal, toda la marea humana que te encuentras aquí dentro y el tipo de trabajo que han escogido, que para mí sería impensable porque supone trabajar con personas, dándolo todo con absoluta disponibilidad. Era una forma de simbolizarlo con ese personaje que se olvida de sí mismo para volcarse a los demás. En realidad, está dedicado a todos los neumólogos, auxiliares de clínica, enfermeras... El caso es que al principio pensaba que tenía poco que decir y además no era una persona con oficio para escribir. Pero entonces pensé en el proyecto y me dije, ¡ostras!, que en un hospital tan bien dotado haya también una gente que se preocupa de incluir este componente humano dentro del tratamiento médico es importantísimo. ¡La cuestión humana es tan importante en la relación profesional sanitario-paciente! Y este proyecto recoge tan bien todo esto. Cuando cogí el bolígrafo para empezar a escribir me vino a la cabeza un muy buen amigo -compañero de trabajo y sin embargo amigo-. Su principal dedicación es la pintura y la escultura y es un creador compulsivo. Escribió una novela y se la autopublicó. En la novela ocurría una catástrofe parecida a la de mi relato que me pareció rompedora y por eso la utilicé, mencionando de dónde había surgido. En su historia se hunde el suelo de una pista de baile y yo lo adapté a la marquesina de entrada al hospital, porque quería que saliera un hospital que ha sido como una segunda residencia para mí. Recuerdo que en uno de los ingresos le pedía a una enfermera: ‘escucha, ¿no me podría empadronar yo aquí?’ 

- ¿Qué sensaciones tuviste al ver tu relato escrito en el libro?

Sentí una ilusión enorme al ver publicado el relato, porque sé cuánto esfuerzo les supone a las personas que dedican tiempo, que tienen capacidad creativa... ¡que les publiquen algo es dificilísimo! Me hizo mucha ilusión y me hizo comprender algo mejor todo el proyecto.

- ¿Crees que la escritura es una herramienta terapéutica importante?

De la misma manera que mediante la música liberas y expresas muchos sentimientos, estoy convencido de que con la escritura pasa lo mismo y para comprobarlo no tienes más que coger cualquiera de los tres volúmenes de RELAT-Hos. En un hospital puedes encontrarte en una situación crítica, a veces te va la vida, otras no, pero sí te juegas muchas cosas. En esos momentos se remueven muchas emociones, y escribir es una forma de canalizar todo eso, es una especie de psicoterapia. De hecho, siempre he tenido un grupito de amigos que nos juntamos de vez en cuando para hacer algo de música, bossa nova. Yo toco la guitarra y canto un poco. Nos lo pasamos bien...cuando nos vemos.

- ¿Escribes habitualmente?

- Lo cierto es que no. De joven sí había leído y mi padre sí era un gran lector, y haces lo que ves hacer a tu padre... Por eso en mi primera juventud si leí bastante, pero desde el año 2005 sin gafas me era completamente imposible y no me acostumbraba a ellas, así que dejé de leer. Una vez empecé a escribir un relato, pero lo dejé interrumpido y nunca más, porque ni es lo mío, ni me lo creo.

- Para acabar, ¿nos puedes recomendar un libro?

- Me viene a la cabeza un libro que leí mientras hacía la mili, La peste, de Albert Camus, que también está protagonizado por un médico.

En este enlace podéis escuchar al grupo de bossa nova en el que toca Sergi Ferri