“Si la ocasión se plantea, volveré a escribir mil y una vivencias”
- ¿Qué pensaste cuando tuviste el primer contacto con el proyecto RELAT-Hos? ¿Cómo lo conociste?
- Anna Belén Torondell.- Fue el primer día que pude salir de la habitación después de 45 días sin poder hacerlo, y todo lo que pudiera hacer fuera de aquellas cuatro paredes era algo experimental y gratificante. Entonces vi colgada la hoja informativa de RELAT-Hos en una de las paredes de la unidad y me llamó mucho la atención. Pensé entonces ¿qué querrá decir?
- ¿Tuviste claro desde el principio que querías participar?
- A.B.T.- Sí. Realmente fue como una meta para mí. Me planteé si sería capaz de expresar realmente lo que sentía. Entonces me dije: vamos a probarlo, no perderemos nada.
- ¿Qué sensaciones tuviste en ver tu relato escrito en el libro?
- A.B.T.- La verdad es que no pensaba que el relato llegara a ser parte del libro de RELATO-Hos. Después impacta un poco verlo publicado. Visto con el tiempo, realmente pude escribir lo que sentía en aquellos momentos, y si esto ayuda a otra gente a sentirse acompañada en momentos complicados, me doy por satisfecha.
- ¿Crees que la escritura es una herramienta terapéutica importante?
- A.B.T.- En mi caso, la lectura es muy importante en mi vida. Me gusta mucho leer; es importante y gratificante. Además, si después puedes transmitir por escrito lo que sientes aún lo es más.
- ¿Recuerdas cómo llegas a escribir tu relato, de un tirón, poco a poco en diferentes días ...?
- A.B.T.- Creo que lo escribí en unos 5 días. Cuando el tratamiento me daba tregua, aprovechaba para transmitir lo que yo realmente pensaba en aquel momento y sigo pensando ahora.
- ¿Escribes habitualmente? Y si fue la primera vez ¿has continuado haciéndolo desde entonces?
- A.B.T.- Nunca había hecho ningún escrito ni ningún relato. Realmente no me lo había planteado nunca, siempre me había gustado más la lectura que la escritura. Y lo cierto es que no lo he vuelto a hacer, no me ha vuelto salir la ocasión. Pero si esta ocasión se planteara, volvería a explicar mil y una vivencias.
- Por último ¿nos puedes recomendar un libro?
- A.B.T.- Me gusta mucho leer, pero no tengo una temática o un libro preferido. Sin embargo, sí que hay un libro al que tengo mucho aprecio. Me lo regaló una enfermera del Hospital de Bellvitge y se llama Sabias, la cara oculta de la ciencia. El día que me fui de la planta 7.2 del hospital después de haber estado ingresada tres meses a más de 200 km de casa, parte de los profesionales sanitarios me escribieron dedicatorias en el libro y me lo firmó. En los casi cuatro años que han pasado desde entonces lo he leído dos veces y aquellas dedicatorias muchas veces más, porque realmente me sentí muy bien con todo el personal sanitario, que fueron la familia que en aquellos momentos no podía estar conmigo.