Estreñimiento: qué es y cómo tratarlo

Estreñimiento significa que existe dificultad para evacuar fácilmente o de manera regular. Esto puede traducirse en tener menos de una evacuación cada tres días y que las heces fecales pueden ser duras o difíciles de pasar. Algunas personas que tienen estreñimiento presentan dolor al defecar y al pujo, o sensación incompleta de evacuar el intestino. Las evacuaciones normales pueden variar desde tres al día hasta una evacuación cada tres días.

Casi todas las personas sufren estreñimiento en algún momento de su vida. Este síntoma es más común en mujeres y adultos mayores de 65 años. Las mujeres embarazadas pueden tener estreñimiento, ya que los movimientos intestinales se hacen más lentos. Este problema también es común en el postparto o después de una cirugía. La mayor parte de los problemas de estreñimiento son temporales y no graves. El entender las causas, prevenirlas y tratarlas puede ayudar a las personas a encontrar mejoría de esta condición. 

  • Comidas irregulares con bajo contenido en fibra
  • Poca actividad física
  • Algunos medicamentos
  • Síndrome de colon irritable
  • Cambios en la vida diaria o rutina (embarazo, envejecimiento, viajar)
  • Abuso del uso de laxantes
  • Ignorar la urgencia de ir a defecar
  • Deshidratación
  • Enfermedades específicas como infarto cerebral
  • Problemas en el colon y recto
  • Problemas con la función intestinal

El diagnóstico y tratamiento de el estreñimiento, normalmente, se basa en la historia clínica y en un examen físico. Por ese motivo, puede requerir de un examen rectal como parte del examen físico.

Las pruebas realizadas por su médico dependerán de la duración y la severidad de el estreñimiento, su edad, presencia de sangre en las heces fecales, cambios en los hábitos de defecación, pérdida de peso involuntaria o bien una historia familiar de cáncer de colon.

Acceso al baño
Seguir una rutina puede ayudar a retomar el control de los intestinos. Para ello es importante que se siente cada día unos 10 minutos aproximadamente en el lavabo tranquilamente (preferentemente media hora después del desayuno). 

La manera en la que usted se siente en el sanitario puede marcar una gran diferencia de cómo se vacía el intestino. Una posición correcta puede mejorar el ángulo del recto, ayudar a sus músculos a que trabajen de manera eficiente y sin pujar. Es importante que siga estos pasos:

  • Siéntese cómodamente en el retrete con las piernas separadas.
  • Coloque los pies planos en un taburete (de unos 20cm de altura).
  • Incline sus caderas hacia delante y apoye sus codos y antebrazos en los muslos.
  • Relájese y respire con normalidad, no trate de contener la respiración. 
  • Ensanche la cintura abombando sus músculos abdominales.
  • Relaje el ano.
  • Utilice los músculos abdominales como una “bomba” para empujar la materia fecal hacia fuera. 
  • No se quede sentada/o más de 10 minutos, si no ha podido evacuar durante este tiempo, vuelva a probar más tarde. 

Recuerde que esta técnica puede llevar tiempo y práctica, no se desanime.


 

Dieta

Ingerir un tipo de alimentos de manera regular y tener un adecuado aporte de líquidos son los factores más importantes para un buen funcionamiento intestinal. Una dieta con suficiente fibra (20 a 35 gramos por día), ayuda a mantener y dar forma a las heces fecales.

Algunas personas, al consumir un alto contenido en fibra, pueden tener distensión abdominal o gases.

Trate de incrementar la fibra en su dieta basándose en fibra soluble y natural (frutas, vegetales y avena) en vez de fibra insoluble (salvado). Comience con pequeños incrementos hasta que sus heces se vuelvan más suaves y frecuentes. Algunos alimentos tienen propiedades laxantes de manera natural como los higos, ciruela, pasa, kiwis, las melazas. Añadir linaza triturada a su dieta le ayudará a mejorar la consistencia de sus heces y pasarlas más fácilmente. Algunas personas sufren estreñimiento más fácilmente, para que esto no ocurra se recomienda evitar alimentos bajos en fibra como helados, quesos, carnes y alimentos procesados. Para prevenir la deshidratación y ayudar a evitar el estreñimiento, se recomienda beber de 1.5 a 2 litros de agua o zumos vegetales o frutas todos los días.

Tratamiento médico

El tratamiento para el estreñimiento depende de la causa, la severidad y la duración del problema. En algunos casos, con solo modificar la ingesta apropiada de alimentos y pequeños cambios en el estilo de vida es suficiente para mejorar y prevenir este problema. Si estos cambios no funcionan, deberá seguir las recomendaciones de su equipo médico.

Algunas veces el estreñimiento puede llevar a complicaciones. Estas complicaciones incluyen hemorroides y fisuras anales (desgarro alrededor de la piel del ano) causadas por heces duras que estiran el músculo del esfínter anal. Como resultado puede existir sangrado por el recto que se manifiesta con hilos de sangre sobre la materia fecal. En algunos casos, pujar puede llevar a un prolapso rectal (que el recto se salga o protruya). Esta condición se asocia a una secreción constante de moco por el ano. En algunos casos, eliminar la causa del pujo constante es suficiente para mejorar los síntomas, pero en casos de prolapso crónico o severo, se requiere de cirugía para reforzar y tensar los músculos del esfínter anal o reparar el prolapso rectal.

Puntos a recordar

  1. El estreñimiento afecta a casi cualquier persona en cualquier momento de su vida.
  2. Mucha gente piensa que están constipados, cuando en general sus movimientos intestinales son regulares.
  3. Las causas más comunes de estreñimiento están relacionadas con el estilo de vida y con una dieta pobre en fibra y poca actividad física.
  4. Otras causas de estreñimiento incluyen medicamentos, síndrome de colon irritable, abuso de laxantes y enfermedades específicas.
  5. Su historial médico y un examen físico pueden ser las únicas pruebas necesarias antes de que un médico pueda sugerirle algún medicamento.
  6. En la mayoría de los casos, estas sencillas recomendaciones le pueden ayudar a mejorar y prevenir que el estreñimiento sea recurrente:
    1. Coma una dieta balanceada alta en fibra soluble que incluya frutas frescas y vegetales.
    2. Tome abundantes líquidos.
    3. Ejercítese regularmente.
    4. Escoja un tiempo para ir al baño después del desayuno o la cena lejos de distracciones.
    5. No ignore la urgencia de ir a evacuar.
    6. Entienda que los hábitos intestinales normales pueden variar.
    7. Cuando note algún cambio prolongado o significante en sus hábitos intestinales, consúltelo con su médico.

Hospital Universitari de Bellvitge

edit-webform-itemsedit-actions

Suscríbete a nuestros boletines

Selecciona el boletín que quieres recibir: