El equipo de la Unidad de Ictus del Hospital Universitario de Bellvitge ha celebrado el Día Mundial del Ictus el pasado 29 de octubre con una jornada dirigida a los usuarios y profesionales del hospital durante la que han ofrecido consejos sobre hábitos y alimentación
saludable y han efectuado controles de la presión arterial, la glucemia y el estado de las arterias.
Como cada año, el Día Mundial del Ictus supone un momento oportuno para recordar la importancia de la prevención y concienciación sobre esta enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo. La Unidad de Ictus del Servicio de Neurología del HUB, como parte del compromiso constante con la salud cerebral, ha llevado a cabo una serie de actividades diseñadas para remarcar el papel primordial de la prevención en la enfermedad. Se ha realizado cribado y educación para la salud a 179 personas -un 67% más que el pasado año- y se han llevado a cabo 72 ecografías doppler, un 80% más que en 2023.
El vestíbulo del Hospital de Bellvitge se ha convertido, así, en el espacio de una campaña de prevención en la que enfermeras y médicos han recordado a los visitantes la importancia de seguir unos hábitos de vida saludables y mantener a raya los factores de riesgo vascular, como la hipertensión arterial, con el objetivo de prevenir la aparición de esta enfermedad cada vez más prevalente y con mayor incidencia en personas jóvenes.
Roche ha colaborado en la actividad de sensibilización ciudadana con la cesión de tensiómetros y básculas inteligentes para las pruebas a los ciudadanos. Además, también se han distribuido piezas de fruta, gracias a la colaboración de Clece.
El ictus es una alteración brusca de la circulación de la sangre en el cerebro, producida por la obstrucción o la rotura de una arteria. Esto puede producir daños en determinadas zonas del cerebro, cada una de las cuales tiene una función determinada, que pueden dejar de funcionar. Así pues, por ejemplo, el ictus puede afectar al habla, al movimiento de las extremidades, a la visión, entre otras, ya sea de una forma transitoria o más permanente.
En Catalunya, más de 13.000 personas ingresan cada año por ictus o en los hospitales, de las cuales la mitad pueden volver a vivir independientemente en tres meses. Un 15% mueren y el otro 35% de los pacientes sufren secuelas limitantes. Se calcula que una de cada seis personas sufrirá un ictus en algún momento de su vida.
En este enlace podéis ver el álbum del Dia Mundial del Ictus 2024