Hoy, lunes 16 de septiembre, ha entrado en funcionamiento el nuevo bloque quirúrgico del Hospital Universitario de Bellvitge. El nuevo bloque, inaugurado el pasado viernes por el presidente de la Generalitat, está formado por 31 quirófanos, de los cuales 7 –dedicados a la cirugía mayor ambulatoria– ya se abrieron en 2017.
Los 24 restantes, que se ponen en marcha de forma progresiva a partir de hoy, constituyen el grueso de las instalaciones quirúrgicas del hospital, y están dotados con tecnología punta que permitirá a los profesionales realizar las cirugías más complejas con equipamiento de última generación.
El nuevo bloque quirúrgico permitirá también un incremento de la actividad: de 16.617 intervenciones de cirugía mayor en 2016 (antes de la inauguración de los 7 primeros quirófanos de CMA) se pasará a 21.494 en 2020 (con la nueva área a pleno rendimiento). De este modo, el hospital podrá seguir trabajando para disminuir las listas de espera, en especial de enfermedades como las de la columna vertebral, el cáncer de mama o la obesidad mórbida. También posibilitará que se inicien programas como el de carcinomatosis peritoneal y el de cambio de sexo.
Bellvitge es el primer hospital del Estado que dispone de tres quirófanos híbridos, dos de los cuales incluyen un escáner de tomografía computarizada (TC), y el tercero un escáner de angiotomografía computarizada (angio-TC). Estos dispositivos de radiodiagnóstico en la misma sala de operaciones evitan tener que trasladar a los pacientes para realizar determinados controles antes, durante y después de la operación. También proporcionan valiosa información en tiempo real al equipo médico, y posibilitan que todo el proceso sea más ágil, preciso y seguro.
Asimismo, otros dos quirófanos son sistemas robotizados (Da Vinci®), donde el cirujano trabaja desde una consola que dirige unos brazos robóticos, lo que le permite tener una mejor visión del campo quirúrgico y realizar movimientos más precisos. El Hospital Universitario de Bellvitge fue en 2009 uno de los centros pioneros en el uso de esta tecnología, y el hecho de haber incorporado este año un segundo sistema robotizado le permitirá pasar de 275 operaciones de este tipo en 2018 a 575 en 2020.
Otro equipamiento tecnológico destacado, que ya se utiliza en Bellvitge desde el 2015, es la radioterapia intraoperatoria, la que permite, en el mismo acto en que se extrae un tumor de mama, aplicar una radiación muy específica sobre la zona afectada. El nuevo bloque también dispone de otras tecnologías punteras, como la biopsia de fusión de imágenes para el diagnóstico del cáncer de próstata.
Espacios diáfanos para el bienestar del paciente
Las nuevas salas de operaciones y sus servicios de apoyo ocupan 8.000 m2, casi el doble de los 4.500 m2 que ocupaban hasta ahora, con una superficie media de 50 m2 por quirófano. Por primera vez se cuenta con una unidad de recuperación postanestésica única, con 22 puntos de atención, concebida como un espacio diáfano con mucha claridad y luz natural para asegurar el bienestar de los pacientes.
Simultáneamente, también se pone en funcionamiento una nueva central de esterilización, ubicada en la planta -1 del mismo edificio y directamente conectada con los quirófanos, con una superficie de más de 1.000 m2.
Todos los sistemas principales de las salas de operaciones cuelgan del techo desde una serie de torretas electrónicas que minimizan el riesgo de contaminación y hacen más cómoda la actividad profesional. Asimismo, un innovador sistema de integración de señales permite que los profesionales puedan acceder, desde una pantalla táctil, a los datos médicos y las pruebas diagnósticas del paciente, con imágenes en tres dimensiones que se pueden segmentar, almacenar y reenviar.
Los quirófanos están intercomunicados con la sala de formación y con el salón de actos del Hospital y permiten realizar retransmisiones de audio y vídeo en el exterior a través de videoconferencias o streaming. Cada profesional puede gestionar la información disponible y personalizar la pantalla según sus necesidades y el tipo de intervención.
La nueva área también está dotada de sistemas innovadores en cuanto a la preparación y distribución del material para las intervenciones quirúrgicas, y también de climatización y consumo eléctrico, con un sistema que permite ahorrar hasta un 70% de energía en relación con el convencional. Asimismo, se ha implantado un procedimiento para informar en tiempo real a los familiares de la localización del paciente a través del teléfono móvil.
Inversión de futuro
Este salto tecnológico hace del Hospital Universitario de Bellvitge un centro plenamente preparado para la cirugía del futuro, que será cada vez más precisa, menos invasiva, más personalizada y más colaborativa –reuniendo en una misma sala de operaciones a profesionales de distintas especialidades–.
Para el equipamiento de la totalidad del bloque quirúrgico se han invertido hasta 20 millones de euros, que hay que sumar a los 82 millones invertidos en la infraestructura de todo el edificio tecnoquirúrgico.
Además de los 31 quirófanos del nuevo bloque, el hospital cuenta con 2 quirófanos más de oftalmología, en la planta 0 del edificio principal. En total, el año pasado el Hospital de Bellvitge llevó a cabo 20.574 intervenciones de cirugía mayor (12.535 con hospitalización y 8.039 ambulatorias), lo que representa 87 cirugías mayores cada día.