Este mes de enero, el Servicio de Urología del Hospital Universitario de Bellvitge ha llevado a cabo el primer trasplante renal ortotópico con cirugía robótica que se realiza a nivel mundial.
El trasplante renal ortotópico es una cirugía compleja poco frecuente que consiste en extraer un riñón del paciente con insuficiencia renal (normalmente, el izquierdo) e implantar un órgano de donante en el mismo lugar. Es un procedimiento distinto y más complejo que el trasplante renal heterotópico, el más habitual, en el que se conservan los dos riñones deteriorados del paciente y el órgano de donante se implanta como un tercer riñón en una posición inferior, la fosa ilíaca, conectado a la arteria y la vena de esta región anatómica.
La técnica del trasplante renal ortotópico fue desarrollada a nivel mundial en los años setenta por el equipo del Dr. Josep M. Gil-Vernet y se utiliza principalmente con pacientes que no pueden recibir un trasplante heterotópico por problemas vasculares en las arterias ilíacas.
Hasta ahora, todos los trasplantes renales ortotópicos se habían practicado mediante una herida intercostal grande que implicaba una recuperación más larga y dolorosa y con más riesgo de complicaciones. Por primera vez, el Hospital Universitario de Bellvitge la ha realizado mediante el sistema quirúrgico robotizado Da Vinci, que permite practicar una incisión más pequeña –de la dimensión justa para introducir el riñón– y efectuar las suturas arteriales y venosas con más seguridad gracias a la precisión de los brazos robóticos y la visión aumentada de que dispone el cirujano.
El primer paciente trasplantado ha sido un hombre de 65 años que ha recibido un órgano de donante cadáver. Además de la insuficiencia renal, este paciente tenía varios antecedentes quirúrgicos abdominales que impedían practicarle un trasplante heterotópico. Sin este recurso, habría tenido que continuar en tratamiento de diálisis el resto de su vida. Su evolución tras el trasplante está siendo buena.
El Dr. Francesc Vigués, jefe del Servicio de Urología del Hospital Universitario de Bellvitge, destaca que este logro ha sido una realidad gracias a la larga experiencia del servicio en cirugía robótica. Un tipo de intervención urgente y a menudo fuera del horario habitual como ésta, afirma, “sólo es posible cuando el hospital llega a disponer de un número crítico suficiente de cirujanos, personal de enfermería y otros especialistas experimentados en el trabajo en un quirófano robotizado”. Según él, esta nueva técnica tiene buenas perspectivas de futuro, ya que “los resultados son tan positivos como los de los demás trasplantes, y cada vez tenemos en listas de espera más pacientes de edad avanzada, algunos con problemas circulatorios que imposibilitan el trasplante convencional”.
El Hospital Universitario de Bellvitge ha sido este último año el centro de España que ha practicado más trasplantes renales (con un total de 196 intervenciones). En 2009, fue uno de los pioneros en incorporar la cirugía urológica robótica. En octubre de 2018 fue el tercero de España en iniciar un programa de trasplante de riñón mediante cirugía robótica, y en diciembre del mismo año el primero de España y uno de los primeros de Europa en efectuar un trasplante de riñón de un donante cadáver. En la última edición de los premios TOP 20, ha sido reconocido como el mejor hospital de España en el área del riñón y las vías urinarias.